YUYI...YUYITO

Un día normal, caminando por la esquina preferida, de mi centro comercial preferido, en mi ciudad preferida, pensando en mis temas preferidos, se cruzo frente a mi la mujer, no una mujer, la mujer mas mas, ella me miro muy rápidamente, solo fueron milésimas de segundos, pero su mirada fue tan penetrante, tan alucinante, tan inquietante, que supe que nada nunca seria igual.

En la noche mientras dormía sentía que alguien me acompañaba, sentía que era un sueño y tuve mucho miedo de abrir los ojos y que no lo fuera, pero una suave voz me dijo “te amo”, mi corazón se lleno de tranquilidad y pude descansar como nunca lo había hecho, en la mañana tenia la sensación de que estaba en un lugar desconocido, en una cama que no era mi cama, en un cuarto que no era mi cuarto pero que por alguna razón se me hacia muy familiar, cuando trate de levantarme unos brazos delicados me sujetaron del cuello y de una manera inesperada recibí un tibio beso, un beso que sabia a buenos días, un beso que me decía que mi sábado iba a ser maravilloso, aun con mis ojos cerrados tuve miedo de descubrir que fuera un sueño. Cuando logre recuperarme de ese maravilloso momento, abrí mis ojos y vi esa mirada penetrante, alucinante, inquietante. Efectivamente era una pesadilla y a la vez era mi sueño. Era esa niña de ojos chinos, de labios dulces que saben a gomitas agridulces.

Ahora los días no son normales.